En cualquier momento se hace necesario enfrentarse a una reforma en la vivienda que se habita o se tiene pensado habitar. Ya sea cuando se ha adquirido o alquilado un inmueble de segunda mano, como por llevar demasiado tiempo en el propio y querer adaptarlo a los nuevos gustos y necesidades, saber a qué va a enfrentarse con una reforma ayudará a tomar las debidas medidas y precauciones.
Se dice que se sabe cuando se empieza con una reforma, pero no cuando se acaba. Que se prolongue en el tiempo es uno de los principales temores que se adquiere al dar comienzo este tipo de obras en el hogar, pero no es el único. Que aumente el coste, que no salga como se tenía planificado, que llegue algún tipo de denuncia por no tener la documentación en regla. Hay que tener especial precaución cuando se trata de reformas integrales, pues se requiere mayor planificación y conocimientos.
Para estas acciones, lo más aconsejable es contactar con una empresa que garantice un buen trabajo en el tiempo acordado y que cumpla con el proyecto y presupuesto pactado. Accesiblereformas.com se presenta como el equipo profesional líder absoluto en las reformas integrales en Barcelona. Gracias a su equipo multidisciplinar, son capaces de ejecutar proyectos de todo tipo, acompañando en todo momento al cliente, propietario o inquilino, para ajustarse al máximo a sus deseos e ideas.
Estos son los consejos que hay que seguir para ganar la batalla en una reforma integral
Que no le quepa la más mínima duda a aquel que se enfrenta a una reforma integral de que su vivienda se va a convertir en un auténtico campo de batalla. El que ha encargado la obra, el propietario o inquilino, no debe permanecer impasible ni antes, ni durante, ni siquiera después de haber ganado la lucha.
Los bandos estarán conformados por el equipo de trabajo y el cliente, por un lado, y el espacio a cambiar, por el otro. El mapa del terreno a conquistar será el proyecto de reforma y las armas la calidad del equipo contratado y su experiencia. Se deberá tener una idea clara de lo que se quiere, estar presente durante la ejecución de la obra y controlar los acabados y los resultados después de finalizada.
- Saber lo que se quiere y planificar la obra
Cuando se comienza a plantear la necesidad de una reforma integral, se reconoce el aspecto general de la situación, pero hay que entrar a fondo en los detalles y tener muy claro cuál será el aspecto final que se quiere obtener. Lo más aconsejable es sentarse varios días antes con papel y lápiz e ir apuntando ideas y conceptos que se quieren llevar a cabo. Estudiar tendencias y estilos para coger referencias, observar las estancias desde diferentes puntos de vista, apuntar las necesidades que se quieren cubrir…
Con todos estos datos, se podrá tener una idea más clara de lo que realmente se quiere y se sabrá explicar y desarrollar con mayor profusión de detalles a la empresa encargada de llevar a cabo la obra.
- La elección de la empresa
Esta decisión es fundamental para que el proyecto de reforma se realice de la forma correcta, sin que suponga un exceso de carga y presión sobre los propietarios o inquilinos. Una empresa que ofrezca este servicio debe demostrar sólidos conocimientos y experiencia, aportar un equipo multidisciplinar para que cubra de manera experta todos y cada uno de los pasos que conlleva una reforma integral. En cada ciudad, destaca una de estas empresas, convirtiéndose en el referente absoluto para los trabajos en la zona.
Esto es lo que ocurre con Accesible Reformas en Barcelona, la organización con una sólida experiencia que ofrece un equipo de arquitectos técnicos que desempeñarán de forma óptima la función de coordinadores y jefes de obra. Profesionales siempre dispuestos a asesorar y a escuchar a sus clientes, solucionando cualquier duda posible, así como haciendo todo lo posible por implementar las nuevas ideas que vayan surgiendo.
- Estar presente durante los trabajos
El lugar dentro de este campo de batalla que debe ocupar el propietario o inquilino debe ser el de observador y mando al mismo tiempo. No debe interferir en el trabajo de los profesionales, pero tampoco permitir que lo descuiden. Estará preparado para solucionar cualquier duda, sin molestar, colaborar o ayudar en lo necesario, sin estorbar. Estar presente, pero sin interferir. Se trata de controlar el trabajo, ayudar y ser útil, pero reconociendo el trabajo de los verdaderos expertos.
- Hablar con la comunidad
Como regla general, la empresa encargada de la obra debe solicitar los permisos y licencias necesarios para cumplir con la ley y la normativa local, pero, a nivel particular, deberá ser el propietario o inquilino quien lleve a cabo las gestiones necesarias. Es más que probable que se requiera utilizar zonas comunes para el trasiego de materiales, trabajadores y elementos necesarios para la obra, esto puede perjudicar la convivencia en la comunidad. Es aconsejable reunir previamente a los vecinos y pedir permiso o avisar de la obra que se va a producir, pidiendo disculpas y anticipando los horarios de trabajo. De este modo, se evitarán posibles denuncias, discusiones o actividades que interrumpan o interfieran en el desarrollo de la reforma.
Redactado por Israel Guerra